Otro Mobile World Congress, y otra oportunidad para que la plataforma de Microsoft haga un buen papel delante de la potente artillería Android que se está presentando estos días. Los chicos de Windows han utilizado el evento para presentar teléfonos, y de paso, hablar un poco sobre su sistema operativo.
La apuesta en esta ocasión pasa por productos interesantes por precio, algo que parece una fijación desde que Microsoft tomó las riendas del barco de Nokia. Desde entonces solo ha presentado teléfonos asequibles, y bastante interesantes: Lumia 535, Lumia 435 y 532. El próximo componente se llama Microsoft Lumia 640, además de una variante de mayor tamaño apellidada XL.
En todos ellos sigue habiendo mucha esencia Nokia, y no creemos que esas características vayan a cambiar en mucho tiempo en la familia Lumia.
Realmente hace falta un revulsivo en la plataforma, algo que detone el interés por parte del gran público - las cuotas de mercado son mínimas -, pero no creemos que el problema esté en el producto en sí, sino la forma de venderlos, o de conocerlos. Hablando de conocer, vamos a por los nuevos Lumia.
